El desierto es el recuerdo del Mar.
Una pila de conchas marinas en una urna es una ofrenda, un abandono, un recuerdo, un cúmulo pero nunca un desperdicio.

La tradición Concheros dejó vestigios de una actividad que todavía es reconocible en las regiones costeras del estado, la recolección de moluscos, alimentos extraordinarios que según Anthony Bourdain encarnan la perfección, al ofrecer una propia salsa suprema.
Esa es la imagen con la que se da la bienvenida al Museo Regional de Nayarit.

Las tumbas de tiro de Ixtlán del Río son otro testigo único, vestigio de las civilizaciones que poblaron nuestro estado, se representan para mostrar las características de sus ritos y las particularidades únicas de este sistema constructivo que es ofrenda y entierro ceremonial.

Ofrendas a la muerte como testimonios a la vida.

Dos espléndidas figuras chinescas expresan y representan atributos en los ritos de la fertilidad, con rasgos que manifiestan el origen étnico del continente, y el uso de la técnica en material, estilo y coloración.

La Segunda Planta recibe con las fauces de un enorme saurópsido disecado, que puebla las historias infantiles de todos los que de niños le visitamos.

Otras salas de exposición permanentes albergan las urnas Mololoa que remiten a figuras que podrían emerger de las narraciones de Leonora Carrington.

El rostro del pasado es el recuerdo del presente.

Ubicado en un edificio que es también monumento histórico, el Museo fue inaugurado el 29 de julio de 1949 y sigue celebrando su 75 aniversario.


La Primera Sala de Exposición Temporal presenta ahora mismo la imperdible Códices de México.



Dirección:
Av. México Nte. 91
Centro
63000
Tepic, Nay.
Precio promedio por persona:
$75 MXN
Horario:
lunes a viernes
10:00 - 16:00
sábado 10:00 - 15:00
domingo
CERRADO
↓

Briseida Alcalá
Detrás de mí están mis libros, detrás de mis libros estoy YO.
Busco siempre la aventura del color, el aroma y el sabor.
