En el cielo hay una esperanza, una sola esperanza: amanecer.
No es la juventud sino la madurez el momento del cambio. La acción que nace del pensamiento, la semilla de la virtud de estudiar para conocer y de ese modo compartir.
La conducta ejemplar es la del revoltoso que no acepta un mundo donde no caben todos y que Dios por esa razón no se atreve a volver a mirar.
Melancólico el esteta que nace en el alma de la nueva nación, en esa Rusia Zarista que daría paso a la unión de los pueblos de hoy.
Fiódor Dostoyevski
Se achica el mundo más
Scorpions
Quien iba a creer
Que fueramos tú y yo hermanos
