Hay mañanas que no necesitan más que un pan tibio y algo dulce. Esta es una de esas recetas pequeñas que salvan: rápida, hogareña y con el tipo de ternura que se unta.
Ingredientes
- 2 rebanadas de pan (blanco, artesanal o el que te abrace mejor)
- 1–2 cucharadas de mantequilla
- 2–3 cucharadas de queso cottage
- 1 cucharada de mermelada de fresa
- Opcional: un toque de sal rosada o unas hojitas de menta
Preparación
- Tuesta el pan ligeramente para que quede crujiente por fuera y suave por dentro.
- Unta la mantequilla en la rebanada caliente, dejando que se derrita apenas.
- Agrega el queso cottage, distribuyéndolo sin perfección: la textura es parte del encanto.
- Corona con la mermelada de fresa, dejando que caiga en pequeñas olas rojitas sobre el queso.
- Si quieres elevarlo, termina con sal rosada o una hojita fresca de menta.
Notas del diario
Un desayuno sencillo, casi un suspiro, pero lleno de calma. Ideal para acompañar con café negro, música bajita y luz suave.
— Briseida 🌤️
