A veces repetimos una receta no por rutina, sino porque nos sostiene. Esta entrada es una bitácora íntima sobre cómo una simple tostada de aguacate puede convertirse en refugio, pausa y ancla silenciosa en días agitados.
A veces repetimos una receta no por rutina, sino porque nos sostiene. Esta entrada es una bitácora íntima sobre cómo una simple tostada de aguacate puede convertirse en refugio, pausa y ancla silenciosa en días agitados.
Una mañana lenta, una tostada de aguacate y la pausa que mi cuerpo pedía. En esta entrada sensorial, comparto la intimidad de un desayuno simple, pero lleno de texturas, aromas y ese pequeño ritual de volver al centro a través del sabor.