Briseida Alcalá
La autora entrelaza la muerte, el deseo y el aislamiento en un relato moderno que se desarrolla entre Nueva York y París. Claudio y Cecilia enfrentan sus soledades y pasados migrantes, encontrando en su encuentro una oportunidad de renacer. El amor se presenta como ceguera para uno y despertar para el otro.
Experimentar el luto transforma: las experiencias profundas son siempre sensoriales, el amor por la comida es el amor por la vida.
Inglaterra, esa isla en la que toda literatura parece provenir de la figura de un huérfano es el escenario para el drama de Jane Eyre, niña presa de los abusos de la familia que la acoge, señalando siempre su lugar último en el escalafón social: la que no tiene padres. [árbol sin raíz] La reacción […]
Los materiales de la creación son también la creación.
Briseida Alcalá 