Muse vierte la angustia contenida por años en Showbiz, su disco debut que se mantiene como el mejor de su carrera.
Lanzado el 7 de septiembre de 1999, el disco conserva la frescura para escucharse con deleite de principio a fin. Las letras, personales, trascienden para conectar con el espectador, expresando pesares largamente contenidos, como lastres que no dejan de avanzar.
La instrumentación del rock clásico sabe dar cabida también a sintetizador y teclados para el lucimiento de su mejor instrumento, Matthew Bellamy, que conjuga y conjunta una musicalidad que sienta el terreno de esta represión, que no puede, después de acumulada más que explotar.
Con su piano hipnótico, Sunburn se acopla a la batería para expresar la capacidad estelar de iluminar hasta cegar. Temazo.
She burns like the sun
And I can’t look away
And she’ll burn our horizons make no mistake
Muscle Museum es un giro en la musicalidad, al que caracteriza el picking de la guitarra que expresa la asombrosa resistencia de ese músculo paciente, siempre latiente, el corazón.
And I don’t want you to adore me
Don’t want you to ignore me
When it pleases you
Fillip es una melodía perfecta, equilibrada, contagiosa y exultante y deprimente a la vez que logra explorar la emoción de la anticipación, restringiéndose en la lírica para expresarse con cambios en musicalidad y ritmo.
It’s got to be here
It’s got to be there
It’s got to be now
Or I’ll lose forever
Falling Down es mínima, melancólica, lamento por la incomprensión que ni el paso del tiempo mitiga, la guitarra sin fuerza expresa la languidez que nos arroja por abismos que no conocen fondo.
I was calling your name
But you would never hear me sing
You wouldn’t let me begin
So I’m crawling away
‘Cause you broke my heart in two
No, I will not forget you
Desde ese mismo abismo nace Cave, regodeándose en la fuerza de sus guitarras para dar otro matiz al dolor, el del gozo de saberse hundido.
So come in my cave
And I’ll burn your heart away
Showbiz, tema que da nombre al disco, es la válvula de escape emocional de quien se libera porque se quiebra; la línea de bajo, hipnótica, equipara la sensación siempre falsa de control, con la alcantarilla interna rebosando hasta desbordarse luego de colmarla a forzarla a tragar mas de lo que podía
Controlling my feelings for too long
Forcing our darkest souls to unfold
Unintended tiene una melodía mínima preciosa, con base en el rasgueo de su guitarra acústica, la letra explora la nostalgia infinita por eso que el destiempo no deja que llegue. Demasiado tarde es así demasiado pronto.
I’ll be there as soon as I can
But I’m busy mending broken pieces of the life I had before
Uno es un tema recio de rock con guitarras y una gran línea de bajo, con la fuerza desafiante que sólo con el tiempo dignifica al dolor.
You could have been number one
And you could have ruled the whole world
And we could have had so much fun
But you blew it away
Sober nace desde una interesante metáfora etílica, con una melodía acompasada y contagiosa que embriaga por si misma.
And you’re the only reason
That I remain unfrozen
Escape es agridulce, entre suplicante y dolida, con la suavidad de la primera parte que sabe después explotar para derramar lo largamente contenido.
But I’ll still take all the blame
‘Cause you and me are both one and the same
And it’s driving me mad
Overdue comienza a cerrar el ciclo, para el ajuste de cuentas que conoce que no hay retribución sin balance.
Hate This & I’ll Love que remite a hail to the thief, mientras la lírica explora la fuerza interior que la opresión desarrolla, completando un disco para escuchar de principio a fin. No lo dejen ir.
Cause I was born to destroy you!
And I am growing by the hour!
la paciencia que agota el corazón, antes que el resto de la melodía explote , antes que con un efecto de guitarra, un picking,minetras la letra aborda la fuerza emocional, las batallas del múscuo menos ejercitado, el cora´zon. las batallas que gastan pero no agotan el músculo que menos ejercitan los crueles, el corazón, organo?
Briseida Alcalá 