Categorías
poesía

Poesía amorosa

Rilke es una cuerda que los dioses, a su capricho y voluntad, tañen.

El poeta tensa el arco y prepara la flecha para reclamar, no sin pesar, la individualidad que el afecto siempre arrebata, y ofrecer, a la presencia, la lejanía.

Se trata de un desencanto melancólico e iluminado, de quien conoce que ni siquiera el amor escapa a la condición definitiva del ser humano.

La fugacidad irrepetible del instante está ilustrada exquisitamente en sus Elegías, donde cuestiona la inocencia de los amantes y lo insustancial del sentimiento, ante y contra, la materialidad de las cosas y el mundo. 

Desengaño agravado por unas saetas incapaces de afectar la serenidad del firmamento. 

Desesperado, Rilke se aboca

al rescate de la pureza en una ausencia que signifique afirmación y no abandono,

la separación es dura, pero no imposible, considerada siempre como una escala más de la constante transformación del mundo interior, común a todos los mortales.

Briseida Alcalá

Detrás de mí están mis libros, detrás de mis libros estoy YO.

Busco siempre la aventura del color, el aroma y el sabor.

One reply on “Poesía amorosa”

Deja un comentario