Pero ya estoy divagando. Por eso no hago nada, porque me dedico a divagar. Aunque también podría ser al revés: me dedico a divagar porque no hago nada.
Fiódor Dostoyevski
Rodion Romanovich Raskolnikov es un joven solitario y sin recursos: un huérfano social.
Mito y también héroe, Raskólnikov no es un «un piojo esteta, y nada más», sino un solitario, un hombre en ciernes, pues todavía se le describe y tilda como «joven», epíteto descalificador que equivale a inexperto.
El soliloquio de Raskolnikov es el registro de Dostoyevski recorriendo ilusionado San Petersburgo, es la conciencia del solitario, es el alma rusa en un siguiente grado de pureza.
¿Inteligente o inepto?
Soñador.
Del más lamentable género: desilusionado.
Medidos los pasos que da en verstas, no busca exactitud sino retribución: oportunidad.
Vaga por las calles de la nueva capital, aquella sin «el talento de pronunciar en su medio una nueva palabra»: modernidad.
La materialización de un sueño que es también quimera pero no utopia: una Rusia no moderna sino europea.
El título original de la novela era «los borrachos», y Dostoyevski lo concibió con ese tema central alrededor de la familia, sus consecuencias e implicaciones.
Raskolnikov representa no el crimen del título como oportunidad de asaltar y menos escapar, sino el castigo de atreverse a intentar.
La sociedad rusa es jerárquica pero también hermética, profundamente burocrática, no piramidal sino ortodoxa.
No se le piensa y menos describe o entiende en otros términos que no sea el de una creencia antigua en un orden inapelable e intransmutable.
Discordia de fe: escisión.
Rodia Ródenka; Raskólnikov proviene en ruso de «raskólnik» que significa cismático.
En las noches no blancas sino brumosas del alcohol, Dostoyevski predice la búsqueda de significado en la inminente revolución.
¿Transgresión o dilema?
Incendiario es siempre libertador, soñador, revolucionario: PENSADOR
¿Más inspiración?
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Crime and Punishment by Fyodor Dostoevsky
My rating: 5 of 5 stars
El crimen de Dostoyevski no fue el sueño de un cristiano libre de pensar para sentirse capaz de cambiar al mundo, sino el de un éxito de ventas descomunal y temprano que nunca pagó la renta y lo tuvo dependiendo de su mujer.
Adicto al juego de la ruleta porque apostar significaba siempre ganar.
¿Epilepsia? Ignorancia de críticos comodinos incapaces entender no una mente rapaz sino un corazón con voluntad.
CLÁSICO
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Briseida Alcalá
Detrás de mí están mis libros, detrás de mis libros estoy YO.
Busco siempre la aventura del color, el aroma y el sabor.
Briseida Alcalá 
One reply on “Crimen y Castigo | La discordia de la fe”
[…] Crimen y castigo Rodia experimenta la sed abrasadora cuando el fuego interior amenaza con […]
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