Una serie de misteriosos y violentos asesinatos se desatan con la llegada a una villa alemana de un enigmático anciano y el sonámbulo clarividente que presente como atracción de feria en el clásico de Robert Wiene, Das Cabinet des Dr. Caligari.
La exploración de los sinuosos laberintos de toda mente se representa con un diseño de arte ya icónico de largas galerías y corredores retorcidos, con asientos altos, incómodos e inclinados, matizados con una iluminación dura para crear las sombras que acentúan el tono delirante de la trama. Sin dejar nada al azar Wiene se sirve del Close up para acercarnos al fuero interior de sus personajes, atrapados en un mundo de dobles intenciones y equívocos.
Friedrich Feher, siempre en personaje realiza un destacado trabajo como Francis, el protagonista, quien es además el encargado de relatar la historia a un aparente extraño, con un rostro por el que desfila el largo espectro de la emoción. Werner Krauss es el inolvidable Caligari del título y Conrad Veidt el enajenado zombie homicida.
Narrado en 6 actos, el quinto de ellos está dedicado a un soberbio uso del flashback que devela el origen de las motivaciones de Caligari. Su descenso por la espiral es mostrado con un espléndido uso de la tipografías elemento convencionalmente relegado en el lenguaje audiovisual que aquí desata todo su potencial para crear un momento impactante y hermoso.
El guión a cargo del también legendario Carl Mayer mantiene en todo momento el suspense y guarda para la conclusión una poderosa vuelta de tuerca que nos dejará temblando al mostrar que nada puede ser más aterrador que perderse entre los recovecos laberínticos de nuestra mente.
Se trata sin duda alguna de una obra maestra, referente indispensable de la cinematografía. Si les interesa está disponible en la plataforma de FilmInLatino. No la dejen ir.
Briseida Alcalá 