Invitación e invasión a la intimidad, el Diario de Frida Kahlo ofrece una mirada de primera mano a la autocontemplación de su interioridad, abanico de experiencias, sensaciones, reflexiones, proyecciones que registró a manera de cartas y textos y por supuesto también con esquemas, apuntes, dibujos y bocetos.
Kahlo expresa la singularidad de su existencia en confesiones francas y espontáneas cifradas en el lenguaje de la imaginación. Con lápices de colores, crayones, contés, tintas y aguadas, captura en trazos imperfectos y a menudo caóticos la inmediatez y urgencia del instante que no deja fuera tachaduras, manchas, rayones y enmendaduras.
El diario revela su candidez, pero sobre todo su extraordinaria sensibilidad, su sentir, su pensar, su pesar, sus afinidades políticas alineadas con preocupaciones existenciales, su legendaria pasión por el otro gran pintor de México, Diego Rivera, y también el ingenio y las chanzas de su particular sentido del humor, logradas jerigonzas musicales a la manera del saber popular.
El libro contiene la edición facsimilar del diario, además de una transcripción comentada del mismo que complementa y hasta confronta la visión personal del lector. La edición es preciosa y su introducción a cargo de Carlos Fuentes establece con claridad el proceso creativo por el que su sufrimiento personal es trocado en un arte ya no singular sino compartido. No lo dejen ir.
Briseida Alcalá 